Turning Red
⭐⭐⭐⭐
¿Quién hubiera pensado que un panda rojo gigante sería tan buena metáfora para la menstruación? "Carrie" se queda corto, lo siento Stephen King. Aun me pregunto de dónde Domee Shi, tras su éxito con su cortometraje "Bao" para Pixar, sacó esta idea para su primer largometraje.
Esta historia se enfoca en Mei Mei (Rosalie Chiang), una niña de trece años de ascendencia china que vive en Vancouver a inicios del siglo XXI. Ella trabaja en un templo chino en medio de la ciudad con su mamá (Sandra Oh), quien le exige las mejores calificaciones y que sea perfecta en todos los aspectos. Tras una situación incómoda que la hace pasar su mamá, la maldición familiar se manifiesta en ella, convirtiéndola en un panda rojo gigante cuando se emociona; así que, tiene que esperar hasta cierto fenómeno astronómico para poder encarcelar al panda y seguir su vida normal. Sin embargo, Mei Mei comienza a utilizar este panda para recaudar dinero en su escuela y así poder ir junto a sus amigas al concierto de su banda favorita "4 Town", al grado que termina encariñándose de él y entrando en conflicto con su madre por esto.
Lo primero que resalta es la personalidad de Domee Shi, pues la película comparte muchas similitudes con "Bao" como la importancia de la familia, las tradiciones y elementos de la cultura china. Además, evidentemente la cinta tiene inspiraciones en la propia vida de la directora, se nota que se hizo con mucho cariño, respeto y era algo importante que la directora quería contar. Lo cual, siempre se agradece, pocas veces en las películas de grandes estudios se siente una carga autoral tan marcada.
En lo que respecta a su trabajo como directora y guionista, Shi hace muy buen trabajo. La película es muy dinámica, todo el tiempo está pasando algo y avanza a muy buen ritmo. El guion está muy bien trabajado y estructurado, empieza casi de inmediato, y sí se dedica a desarrollar a los personajes, sobre todo a Mei Mei y su mamá, pero sí deja que todos tengan su momento para brillar. Así mismo, desde el inicio de la película se establece de una manera increíble el tono de la cinta, va a ser algo bien dinámico, ridículo y contado por una niña de trece años que parece que está todo el tiempo en cocaína.
Además, la película incluye referencias a anime muy vistosas, le fascina exagerar todo a niveles graciosísimos y 4 Town es una clara y divertida parodia de las bandas de K-pop actuales. Son pequeños detalles que hacen a la película mucho más entretenida, relacionable y te sacan una sonrisa, porque eso sí, la película nunca deja la comedia de lado y la utiliza muy inteligentemente para avanzar la historia. Es cierto, a veces la comedia raya en la vergüenza ajena, algo de lo que escuché a mucha gente quejarse, pero los personajes actúan como lo hace cualquier persona a los trece años. Sí puede darte pena ajena, porque todos fuimos igual de tontos y ridículos en algún momento, pero la película no es confrontativa al respecto, lo entiende como parte de nosotros y te invita a que te rías de las mismas actitudes y formas de pensar que tú tenías.
La animación, como en cualquier película de Pixar, es espectacular. El nivel de detalle es brutal, al mismo tiempo que mantiene un estilo y estética muy definida y única. En ese sentido, se agradece que la cinta no buscara apegarse a la realidad y verse realista, sino que se permite exagerar y dar un ritmo y corporalidad que no se alcanzaría de otra manera.
Es muy triste que a mucha gente no le haya gustado la película porque aseguran que tiene un contexto muy específico y no se identifican. Tienen razón, pero también son muy egocéntricos, todas las películas ocurren en un contexto muy específico, aunque no lo hagan claro explícitamente como "Turning Red". Eso no debería ser un impedimento para empatizar, creer que solo puedes empatizar con películas que ocurren en tu mismo contexto y con personajes masculinos que te recuerden a ti es una señal de que tienes grandes problemas para empatizar, y has crecido en una sociedad patriarcal. Por que sí, la película toma elementos que se podrían definir como girly, pero no por eso son malos o la película es solo para niñas, de hecho es una estética fresca y pocas veces utilizada.
Sí, es cierto que la película hace referencia explícita a la menstruación, pero también los hombres (o mejor dicho machos) pasamos por la pubertad y vivimos nuestros propios cambios. Es muy falocentrista creer que no podemos mostrar la menstruación aun cuando es algo natural, y que ese elemento superficial nos impida empatizar y desvalidemos una historia por él. Vi esta película junto a una mujer, quien la encontró muy divertida, que entendía muy bien cómo era pasar la pubertad siendo mujer, y me decía que el grupo de amigas de la protagonista generaba una dinámica de conflicto como la que una mujer vive a esa edad en su personalidad. Por lo que, sí puedo creer que la película tenga un impacto diferente, quizás más profundo cuando eres mujer, pero no creo que su público se limite solo al género femenino.
Es una película muy divertida, dinámica, con una historia enternecedora y un subtexto poco sutil muy interesante. Podría mejorar, sí, hay un par de detalles que sí mejorarían la película, pero son mínimos y ya la película es bastante buena y sería demasiado pedir que cambiaran el orden de un par de planos por mis caprichos. Es una cinta que entiende muy bien cómo es tener trece años, cómo actuamos a esa edad, y el rol que nuestra familia juega en todo esto. Porque, eso es lo mejor de la película, el mensaje no es algo básico como que debes respetar y valorar a tu familia, sino que es más profundo y matizado, hablándonos de nuestras responsabilidades y cómo también los padres deben respetar la personalidad propia de sus hijos.

Comments
Post a Comment